Dr. Pipkin, Mariano; Dr Casas, Jose Maria; Dr. Garcia, Maximiliano; Dra. Lezcano, Milagros; Dra Gonzalez Amigo, Florenciaz; Dr. Ayuso, Sebastian; Dra. Oliveri, Vanesa; Dr. Gonzalez Pardo, Fernando Omar.
INTRODUCCIÓN
El sentido de la evaluación cardiovascular precompetitiva (ECP) es la detección de patologías potencialmente causales de muerte súbita (MS) o que puedan agravarse con la práctica deportiva. Existen múltiples publicaciones acerca de los diferentes protocolos y resultados de las ECP en atletas de alto rendimiento profesionales y semi-profesionales que compiten a niveles nacionales en Estados Unidos y Europa, pero no abundan datos de las mismas en deportistas amateurs, que participan en ligas locales, en nuestro país y que son los más frecuentemente evaluados en la práctica diaria. Por lo tanto se desconoce si ambas poblaciones son comparables entre sí, en términos de niveles de entrenamiento, incidencia de patologías cardiovasculares y rendimiento de la ECP.
OBJETIVOS
Se busca investigar el rendimiento, los resultados y los hallazgos de patologías cardiovasculares al realizar la ECP en una población de atletas locales no profesionales.
MATERIAL Y MÉTODOS
De enero de 2017 a enero 2019 fueron evaluados prospectivamente en CEDIC, 1003 atletas (AT) amateurs que entrenan o compiten en el ámbito local. En los menores de 35 años, la ECP consistió en un interrogatorio, examen físico, realización de un electrocardiograma (ECG) y Eco Doppler Cardíaco (EDC), todo a cargo de un médico cardiólogo. A los mayores de 35 años, se agregó una ergometría de 12 derivaciones y una rutina de laboratorio que incluyó glucemia y perfil lipídico. Según el tipo de entrenamiento se los dividió en 3 grupos: Grupo I: Competitivo alto rendimiento, Grupo 2: Competitivo recreativo y Grupo 3: Recreativo
RESULTADOS
En cuanto a la intensidad del entrenamiento, 861 atletas (85%), práctica deporte competitivo de alto rendimiento (11hs semanales), 113 (12%) lo hacen en forma competitiva recreativa (5hs semanales) y 29 (3%) en forma recreativa (4hs semanales).
Las principales disciplinas fueron basket, con 605 atletas (60%), fútbol 173 (17%), rugby 104 (10%) y running 52 (5%). Como resultado de la evaluación, fueron diagnosticadas 42 (4.2%) patologías cardiovasculares, de las cuales 3 (0.3%) están relacionadas con MS, 14 (1.4%) con anomalías congénitas y 25 (2.5 %) fueron factores de riesgo cardiovascular (FRCV).
Hubo 21 casos (2%) de hallazgos que requieren seguimiento para determinar si son patológicos o no. En la población menor de 35 años, el hallazgo de patología fue de 1.74%, predominaron las entidades congénitas y genéticas mientras que en los mayores de 35 años el hallazgo de patología fue de un 15% con una claro predominio de los FRCV.
El interrogatorio aportó información sobre antecedentes familiares de relevancia para el seguimiento pero por sí sólo no ayudó al diagnóstico de patología. En cambio, con el examen físico se diagnosticó Hipertensión arterial en 14 atletas (1.4%). El ECG fue clave en la detección de 3 patologías potencialmente causales de MS (2 Wolf Parkinson White y 1 miocardiopatia hipertrófica) y en aportar hallazgos que requieren seguimiento médico más estricto en 21 atletas (2%).
El EDC fue determinante en el diagnóstico de 14 (1.4%) patologías, todas ellas que pueden agravarse con la práctica deportiva intensa como son la válvula aórtica bicúspide y la dilatación aórtica.
El laboratorio en mayores de 35 años diagnosticó 11 patologías (1.1%), específicamente diabetes y dislipemia. En cambio, en esta población, la Ergometría no ha brindado aportes significativos que lleven a sospechar patología.
Fueron descartados del deporte competitivo 3 atletas (0.3%) debido a miocardiopatía hipertrófica (1), VAB asociada con dilatación
aortica (1) y aorta dilatada (1).
CONCLUSIONES
La realización de una ECP en atletas amateurs ha sido de gran utilidad para la detección de patologías cardiovasculares asintomáticas en una población aparentemente sana por practicar deporte en forma regular.
En los atletas menores de 35 años se han detectado principalmente enfermedades cardiovasculares que podrían ser causa de MS como así también valvulopatías que podrían agravarse con la práctica deportiva.
Es de especial importancia la ECP en atletas mayores de 35 años principalmente por la alta tasa de detección de FRCV no controlados.