CEDIC. CENTRO CARDIOVASCULAR Y ESPECIALIDADES MÉDICAS
La Federación Internacional de Diabetes estima que en el mundo hay más de 190.000.000 de personas que sufren diabetes y no lo saben.
Hay dos formas de diabetes. Tipo 1 o también conocida como diabetes juvenil o diabetes mellitus insulino dependiente, es una enfermedad auto-inmune y metabólica caracterizada por una destrucción selectiva de las células beta del páncreas causando una deficiencia absoluta de insulina. Una persona con Diabetes tipo 2 o más frecuentemente llamada del adulto aunque no exclusiva, es una enfermedad metabólica caracterizada por altos niveles de glucosa en la sangre, debido a una resistencia celular a las acciones de la insulina, combinada con una deficiente secreción de insulina por el páncreas. Estos últimos pueden vivir varios años sin mostrar síntomas, tiempo durante el cual la glucosa o azúcar en sangre alta silenciosamente daña nuestro cuerpo.
De allí la importancia de realizarte controles, por lo menos una vez al año. Un análisis de sangre llamado GLUCEMIA, determina qué cantidad de glucosa o azúcar tenemos en nuestra sangre.
La diabetes tipo 2 a diferencia de la tipo 1 puede prevenirse. La estadística mundial revela que en los últimos años está creciendo de forma alarmante el número de casos de diabetes tipo 2 (hasta ahora casi exclusiva de la población adulta) a una edad muy temprana, derivado de factores ambientales y genéticos. El sobrepeso y la obesidad, cada vez más frecuentes en la población en edad pediátrica, son los principales responsables del incremento de casos de diabetes tipo 2 en niños y adolescentes. La adolescencia también juega un rol relevante en el desarrollo de la diabetes tipo 2, ya que durante este periodo puede producirse una insulinorresistencia fisiológica generada por la hormona del crecimiento. En este caso, tener unos hábitos saludables es fundamental para minimizar el riesgo de desarrollar la enfermedad.